José María Romero analyzes financial turmoil and its impact on the real economy at the great event in the investment funds industry.

March 28 , 2023

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Madrid, 24 de marzo de 2023. José María Romero, director de Economía e Internacional de Equipo Económico, ha pronunciado hoy la ponencia inaugural del evento de referencia en la industria de fondos de inversión española, que ha reunido en Andorra a destacados líderes europeos en la gestión de inversiones y de fondos con los profesionales de la gestión de activos, titulada “Retos económicos y perspectivas 2023”. El evento organizado por RankiaPro y patrocinado por W&K Financial Education ha contado con la participación de, entre otros, Aegon Asset Management, Allianz Global Investors, Columbia ThreaNeedle, ComGest y Federated Hermes.

Tras hacer una breve descripción de los importantes desafíos a los que se enfrenta la economía global derivados de las recientes crisis y con un impacto también muy relevante de las grandes transformaciones, tanto económicas como geopolíticas, Romero ha analizado las turbulencias a las que estamos asistiendo estos días en los mercados, la confluencia entre la economía real y la financiera, y las posibles soluciones desde el ámbito de las políticas públicas, la regulación y el mercado.

Ha destacado dos ideas de especial relevancia, fruto de un sondeo realizado durante su ponencia a los participantes. En primer lugar, que “la mayoría de los asistentes -representantes de los mercados financieros- está percibiendo de forma positiva la actuación en las últimas dos semanas por parte de la Fed y de los principales bancos centrales”. En segundo lugar, apunta a que estos “han considerado por abrumadora mayoría que los casos de pérdida de confianza por parte de determinadas instituciones bancarias en EE.UU. y Europa estos días son casos aislados, y que no estiman que derivará en un contagio generalizado del sistema bancario y financiero internacional”.

Ha continuado su ponencia subrayando que en todo caso los acontecimientos de los últimos días añaden una nueva fuente de incertidumbre a la ya compleja situación económica global, donde los renovados temores a una crisis financiera se suman a las ya existentes tensiones geopolíticas, a la elevada inflación y a una economía mundial en desaceleración. Además, condicionará las decisiones de política monetaria y los objetivos de control de la inflación, especialmente en lo que respecta a futuros aumentos de los tipos de interés oficiales, ante los efectos que pueda tener en términos de estabilidad financiera.

Igualmente ha enfatizado que la combinación de un menor margen de actuación por parte de la política monetaria y la desaceleración del crecimiento, llevarán también la atención a la necesidad de completar la arquitectura del euro -fundamentalmente por el lado de la incompleta Unión Bancaria- y al estado de las finanzas de los países, ante los elevados niveles de endeudamiento público como consecuencia entre otros de las respuestas a las crisis del Covid-19 y energética, y el mayor peso financiero de la deuda ante el fuerte incremento de los tipos de interés.

En este sentido, ha recordado que en España la deuda de las AA. PP. se situó en 1,49 billones de euros en el mes de enero de 2023. Ante el elevado nivel de endeudamiento público y en episodios de tensiones financieras como el actual, ha afirmado que “se vuelve a poner de manifiesto la necesidad de ejecutar un plan creíble de consolidación fiscal a medio-largo plazo, que garantice una senda factible de reducción de la deuda pública, y que permita recuperar a la política fiscal mayor margen de maniobra frente a potenciales choques negativos. Donde todas y cada una de las medidas vayan orientadas a la consecución de los citados objetivos. Dista mucho de ser el caso de la reforma de las pensiones aprobada esta misma semana a través del Real Decreto-ley 2/2023, de 16 de marzo, que se muestra claramente insuficiente para garantizar la sostenibilidad del sistema público de pensiones”.

Para finalizar, José María Romero ha hecho hincapié en la necesidad de una mayor certidumbre en cuanto a las políticas económicas, y que estas reconozcan y vayan encaminadas al fomento del emprendimiento y la actividad empresarial, actividades ambas conducentes al incremento del bienestar del conjunto de la sociedad.

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